Chalet en venta en Altea, Alicante

Descubra esta villa independiente de 300 m² construidos sobre una parcela de 856 m² en la exclusiva urbanización Altea Hills, uno de los lugares más codiciados de la Costa Blanca. Situada en un entorno seguro y vigilado las 24 h, ofrece vistas panorámicas al Mediterráneo desde los cuatro dormitorios, todos exteriores, incluyendo 5 baños completos y un aseo de cortesía. El corazón de la casa lo compone una cocina americana abierta a un amplio comedor y dos salones, todos con vistas privilegiadas al mar.

El exterior es un verdadero paraíso: jardín privado con una piscina de 10 × 5 m, terrazas soleadas y una zona de barbacoa perfecta para el ocio. La villa ha sido recién reformada y equipada al detalle, lista para entrar a vivir. Con múltiples espacios abiertos y pensados para disfrutar del clima mediterráneo, esta propiedad es un sueño hecho realidad.

Altea es conocida como el "Santorini de España" por su pintoresco casco antiguo de casas blancas y cúpulas azules, su patrimonio cultural y sus playas de guijarros y aguas cristalinas. Además, su microclima cálido y estable la convierte en un destino ideal para residir todo el año.

La Costa Blanca cuenta con más de 300 días de sol al año. Un paraíso con excelentes conexiones a toda Europa. El Aeropuerto de Alicante-Elche cuenta con unas modernas y amplias instalaciones y con un fácil y cómodo acceso desde cualquier punto de la provincia.

La Costa Blanca sigue atrayendo a personas de toda Europa, y de otros lugares del mundo, porque ofrece una calidad de vida única en un hermoso entorno a orillas del mar Mediterráneo, rodeado de montañas y de una exuberante vegetación.

Además de los campos de golf y los puertos deportivos que podrás disfrutar por toda la costa, la zona también ofrece la posibilidad de esquiar en la cercana Sierra Nevada, Javalambre o Valdelinares, unos paraísos para amantes de los deportes de invierno, con hermosos paisajes naturales. La Costa Blanca ofrece un estilo de vida singularmente rico, donde las mejores playas y calas del Mediterráneo se combinan con un interior repleto de montañas y pueblos que esconden cultura y monumentos históricos únicos en el mundo.