Finca/Casa Rural en venta en Santa María del Camí, Mallorca

Finca en primera fila: el punto más alto, las mayores exigencias.
Lo que en la costa es la primera línea de mar, en el corazón de Mallorca es esta ubicación: en el punto más alto de Santa María se encuentra esta finca, con unas vistas panorámicas de 360° sin obstáculos, privacidad absoluta y seguridad natural. Una rareza que hoy en día es difícil de encontrar. Aquí, la vista es más que un telón de fondo: es toda una experiencia. Desde la terraza de la piscina, las cumbres de la Serra de Tramuntana parecen estar al alcance de la mano; la misma energía se siente en la piscina infinita de 20 metros. La amplitud, la tranquilidad y la majestuosidad se funden en cada momento. Respire la tranquilidad. Sienta la fuerza de este lugar. La arquitectura «enmarca» estas vistas: diferentes ángulos de visión aportan luz y paisaje a la casa y crean una transición fluida entre los espacios interiores y exteriores. Donde las cumbres se unen con la perfección del diseño, se crea una sensación de bienestar de raro equilibrio y calidad. Esta impresionante finca destaca por su fachada de piedra natural tallada a mano, que se integra armoniosamente en el entorno mediterráneo. En el interior, la exigencia sin concesiones en cuanto a calidad y diseño continúa sin interrupciones. Con una superficie habitable de unos 700 m², esta exclusiva finca ofrece un total de cinco lujosas suites, cada una de ellas con su propio cuarto de baño y una zona exterior privada que invita al descanso. Este impresionante conjunto se complementa con una elegante sala de televisión, una bodega climatizada y una amplia zona de fitness y bienestar, que además ofrece acceso directo a un tranquilo patio ajardinado. El suelo de piedra se seleccionó a mano pieza a pieza durante todo un año en una cantera, lo que le confiere una estética incomparable. El concepto de diseño global, denominado «Contemporary Elegance», combina de forma elegante líneas claras con materiales naturales nobles, creando así un ambiente atemporal y a la vez moderno. Un sofisticado sistema domótico controla todas las funciones, desde las cámaras, los toldos y la gestión completa de la electricidad hasta cada uno de los enchufes y el riego automático del jardín, y proporciona en todo momento información transparente sobre el estado de la casa. Esta finca es un refugio para personas con gusto por lo extraordinario, un lugar que satisface las más altas exigencias en todos los sentidos.