Finca/Casa Rural en venta en Moraira, Teulada-Moraira, Alicante

Esta finca tradicional, soleada todo el día, se encuentra en una tranquila calle sin salida entre Benitachell y Moraira, a pocos pasos de tiendas y restaurantes. La propiedad se asienta sobre una amplia parcela llana y rústica, lo que impide su ampliación, y ofrece hermosas vistas panorámicas del valle y las montañas, e incluso vistas parciales al mar. Desde el camino de acceso, una pequeña entrada con amplio aparcamiento conduce a un garaje con trastero. Desde el garaje, un sendero llano lleva a la escalera de nueve escalones que conduce a la casa y a la terraza de la piscina. Al entrar, se accede a una naya abierta con impresionantes vistas, un lugar ideal para disfrutar de las puestas de sol orientadas al oeste. La puerta principal da directamente al espacioso salón con chimenea y una ventana con vistas a la piscina. Un arco conduce al comedor, un espacio luminoso y ventilado con puertas de cristal que dan a la naya y una ventana. A la izquierda del salón se encuentra la cocina, equipada con armarios color crema brillante y encimeras de granito, e incluye horno, placa de gas, campana extractora telescópica, lavavajillas de 45 cm, lavadora y frigorífico. También hay una despensa. Desde aquí, un pasillo conduce a los dormitorios y al baño. Primero, se encuentra el segundo dormitorio, una habitación espaciosa con armarios empotrados, aire acondicionado y una ventana con vistas al jardín trasero. A continuación, está el baño, bellamente renovado, con ducha a ras de suelo, lavabo con mueble y encimera de cristal negro, y radiador toallero eléctrico. Al final del pasillo se encuentra el espacioso dormitorio principal con armarios empotrados, aire acondicionado y un televisor de pared, ideal para las noches tranquilas o las mañanas relajadas. La terraza de la piscina es privada y muy espaciosa, con hermosas vistas panorámicas. Cuenta con una pérgola para relajarse a la sombra, una mesa y sillas para comer al aire libre, una barbacoa, una mesa de centro con sillas y mucho espacio para tumbonas. La parcela que rodea la finca está cubierta de césped, plantas, arbustos y varios almendros. Hay mucho más que se podría hacer con el espacio disponible. Hay acceso a un trastero bajo la naya con altura limitada.