- 1. La orientación e iluminación
- 2. La distribución y el tamaño de la vivienda
- 3. El aislamiento y posibles ruidos molestos
- 4. La zona en la que se encuentra la vivienda
- 5. El estado del inmueble y las instalaciones
- 6. Las zonas comunes y la fachada
- 7. Comprueba si las características coinciden con el anuncio
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Visitar la casa que podría convertirse en tu nuevo hogar es un momento clave en el proceso de compra. Después de ver la vivienda por primera vez, es posible que te imagines viviendo en ella o te des cuenta de que no es la casa ideal para ti.
Antes de acudir a tu primera visita, ya deberías haber considerado si esa casa se ajusta a tu presupuesto, a tus necesidades y a tu estilo de vida. Si todavía no lo has hecho, este es un de los primeros pasos que deberías llevar a cabo en tu proceso de compra. A menudo nos dejamos llevar por las primeras impresiones y no prestamos suficiente atención a algunos aspectos que podrían hacer que esa no fuera la casa adecuada para ti. Estar preparado y saber en qué fijarse al ver la vivienda por primera vez es fundamental para tomar una decisión bien informada. Si quieres evitar sorpresas cuando te conviertas en propietario, observa detenidamente estos siete aspectos de la vivienda:
1. La orientación e iluminación
Existen muchos aspectos de una vivienda que, en el caso de no gustarte, podrías solucionar realizando una reforma. Sin embargo, la orientación no es uno de ellos. Por esta razón, elegir la orientación adecuada es fundamental. Para ello, solicita siempre un plano de la vivienda para asegurarte de que la casa que vas a comprar tiene la orientación que buscas.
La luminosidad y la temperatura de la casa dependerán de su orientación e influirán directamente en tus gastos del hogar. Elegir la orientación adecuada dependerá de tus necesidades y de la ciudad en la que vivas.
Por ejemplo, los inmuebles orientados al norte suelen ser más fríos, ya que el sol no incide de forma directa. Esto puede ser una ventaja si vives en un clima cálido, pero puede suponer mayor gasto de calefacción si vives en una ciudad más fría. Sin embargo, un piso con orientación sur en un clima cálido tendrá mayor acumulación de calor y, por tanto, puede incrementar el gasto debido al uso del aire acondicionado.
2. La distribución y el tamaño de la vivienda
Las fotos de una vivienda pueden ayudar a hacerte una idea del tamaño y distribución de la misma. Sin embargo, realizar una visita te ayudará a determinar si la distribución de la casa te resulta cómoda y si el tamaño de cada estancia se ajusta a tus necesidades.
De no ser así, es posible que pienses en realizar una reforma para cambiar la distribución o ampliar alguna de las habitaciones. Por esta razón, es recomendable que preguntes por los muros de carga u otros aspectos que puedan impedirte realizar la reforma que deseas.
3. El aislamiento y posibles ruidos molestos
Si vas a visitar una vivienda en la que vas a tener vecinos, es importante prestar atención al aislamiento de las paredes. Teniendo en cuenta que hay sonidos que son habituales, escucha atentamente para identificar cualquier ruido que pueda ser excesivo.
En el caso de que sea posible, te recomendamos visitar la vivienda en diferentes días, a diferentes horas y con las ventanas abiertas y cerradas. Esto te permitirá determinar el ruido exterior debido al tráfico, la existencia de colegios, tiendas o bares en la zona.
Así como hemos dicho que la orientación influirá en la temperatura de tu hogar, el aislamiento también será un factor determinante. Fíjate bien en el estado de las puertas y ventanas, comprueba que cierran correctamente y que no se han deteriorado con el tiempo y la humedad. Esto ayudará a aislar tu casa no solo del ruido, sino también del frío y el calor.
4. La zona en la que se encuentra la vivienda
El barrio en el que se encuentra la vivienda también es uno de los aspectos más importantes a la hora de tomar una decisión. Al igual que la vivienda, es recomendable visitar el barrio en distintas horas del día. Aprovecha para pasear por la zona y comprobar si cumpliría con todas las necesidades de tu día a día. Fíjate en todos los aspectos que sean importantes para ti: tranquilidad, seguridad, cercanía a colegios, centros de salud, supermercados, restaurantes, transporte público, etc.
5. El estado del inmueble y las instalaciones
Presta atención al estado del inmueble en general. Ten en cuenta que cualquier cosa que no funcione o esté en mal estado, supondrá un gasto extra para ti. Estos son algunos de los detalles en los que deberás prestar atención:
- Baños: revisa la ventilación, la existencia de moho y los posibles malos olores
- Cocina: ten en cuenta la ventilación y el estado de las placas de cocina, así como de los azulejos
- Grifos: abre los grifos para comprobar la presión del agua
- Enchufes e interruptores: pregunta si hay algún enchufe que no funcione y prueba todos los interruptores de la luz
- Puertas: revisa si los marcos de las puertas están rotos o agrietados
- Ventanas: comprueba que cierran correctamente y fíjate si hay humedades
- Chimenea o radiadores: pregunta si funcionan o necesitan reparación
- Salidas de aire acondicionado: fíjate en qué habitaciones cuentan con salidas de aire
- Suelo: qué tipo de suelo tiene la vivienda y en qué condiciones está
- Paredes y armarios empotrados: revisa si hay moho, abombamientos u otros defectos por desgaste o humedades
6. Las zonas comunes y la fachada
Es importante pensar que cuando compramos una vivienda no solo estamos comprando el interior de la misma, sino también el exterior. Por eso, sobre todo cuando se trata de una vivienda de segunda mano, es importante fijarse en el estado de la fachada y de las zonas comunes, si existiesen. Ten en cuenta que, si visitas propiedades con pocos años de antigüedad, el estado de la fachada puede reflejar la calidad de los materiales. Además, el mal estado de estas zonas puede suponer posibles derramas en un futuro.
Durante tu visita pide que te enseñen todas las zonas comunes: ascensor, garaje, trasteros, terrazas, piscina, etc.
7. Comprueba si las características coinciden con el anuncio
Tras haber analizado los aspectos mencionados, piensa un momento si estos coinciden con la descripción del anuncio. Compara tus notas con la información proporcionada por el vendedor y anota todo aquello que no se ajusta a la realidad. Si decides comprar la vivienda, esas pequeñas diferencias podrían servirte para negociar el precio de venta.
Ahora que ya conoces muchos de los aspectos en los que deberías fijarte al ver una vivienda, es hora de empezar a concertar visitas. Pero si ya has elegido cuál será tu nueva casa, entonces te recomendamos leer los 10 documentos que deberías solicitar antes de comprar una vivienda para asegurarte de que la vivienda está, no solo en buen estado, sino también en situación legal.
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